El jugador estadounidense se quejó de que su cuenta había sido cerrada sin explicación y que los fondos restantes no habían sido desembolsados. El jugador había declarado que no se le permitía verificar su cuenta y que sus ganancias en su mayoría no eran bonificaciones. El equipo de quejas había intentado investigar el problema pidiéndole más información al jugador y había planeado ponerse en contacto con el casino. Sin embargo, debido a la falta de respuesta del jugador, el Equipo de Quejas no pudo continuar con la investigación y tuvo que rechazar la denuncia. El caso podría reabrirse si el jugador decidiera reanudar la comunicación.