Jugar al baccarat gratis es una buena manera de aprender el funcionamiento del juego, aunque hay que decir que las reglas son muy sencillas. De hecho, podemos resumirlas en apenas unos párrafos.
El juego se centra en dos manos, la de la banca y la del jugador (punto), y el objetivo es apostar cuál conseguirá un total más cercano a 9 o si habrá empate.
Para calcular el total de la mano, las cartas reciben los valores siguientes:
Si la mano tiene una puntuación superior a 9, se resta 10 al total original.
En función del casino, el jugador y la banca pueden recibir una tercera carta en ciertas condiciones
Si apuestas por la mano del jugador y ganas, recibirás el doble de lo apostado, de modo que, si apuestas 10 $, recibirás 20 $ (10 $ de beneficio).
Si apuestas por la mano de la banca y ganas, también recibirás el doble de lo apostado, pero se te restará una comisión del 5% (en la mayoría de versiones del baccarat), de modo que, si apuestas 10 $, recibirás 19,50 $ (9,50 $ de beneficio).
Ahora bien, la opción más lucrativa es acertar el empate, aunque es, de largo, la opción menos probable y ofrece una rentabilidad (RTP) baja: si apuestas por el empate y ganas, recibirás nueve veces lo apostado, de modo que, si apuestas 10 $, recibirás 90 $ (80 $ de beneficio).
A lo largo de los siglos, se han originado diferentes modalidades de baccarat, por lo que es posible que te cruces con alguna de ellas:
Es la versión más extendida en los casinos online. No requiere ningún tipo de habilidad, por lo que encaja perfectamente con la definición de juego de azar.
Como habrás adivinado por el nombre, se trata de una versión antigua muy popular en Francia. Se diferencia del punto y banca en que el jugador puede influir en el resultado del juego, por lo que puede usarse una estrategia. En esta versión, el jugador puede pedir cartas y mezclar las barajas. Nota: es muy difícil encontrar un casino que ofrezca la versión Chemin de Fer.
Se trata de una versión parecida al Chemin de Fer, en la que el jugador con más dinero disponible en cada momento actúa como banca. Aunque no es tan popular como el punto y banca, algunos casinos europeos ofrecen esta versión del baccarat.
Nota: antes de jugar al baccarat en un casino, comprueba de qué versión se trata para asegurarte de que conoces las reglas. Para ello, fíjate en el título y, si no se indica la versión, consulta las reglas del juego.
Gracias a que cada vez más casinos online han adaptado su sitio web a dispositivos móviles, podrás jugar a la gran mayoría de los juegos de baccarat de esta página desde tu teléfono o tableta. Para verlos, haz clic en «Filtro avanzado» y marca la casilla «Compatible con dispositivos móviles».
Es posible que algunos de estos juegos requieran el uso de Flash, una tecnología que ha quedado obsoleta. Ahora bien, cada vez son más los juegos que funcionan con nuevas tecnologías, por lo que este problema pronto será cosa del pasado.
Como el baccarat es un juego de azar, no hay estrategias válidas para jugarlo. No te fíes de los métodos que puedas encontrar en la red, como las estrategias martingala o Fibonacci, ya que estas no garantizan beneficios, y no pagues nunca por consejos expertos.
Lo único que necesitas saber antes de empezar a jugar para evitar perder grandes cantidades de dinero es que solo debes jugar en casinos fiables y que debes marcarte un límite de pérdidas.
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Cuando te hayas decidido, haz clic sobre el juego para empezar a jugar. Realiza tu apuesta, pulsa el botón de repartir y espera a los resultados. El juego te dirá si has ganado o no. A partir de aquí, puedes repetir el proceso tantas veces como quieras.
No. Puedes jugar a todos los juegos de la lista desde el navegador, por lo que no es necesario descargar nada ni crear ninguna cuenta.
Los juegos aptos para dispositivos móviles suelen funcionar igual de bien tanto en el teléfono como en un ordenador.
Sí. Los casinos presenciales garantizan la legitimidad del juego usando un número aleatorio de cartas, mientras que los casinos online la garantizan usando la tecnología adecuada.
Todos los juegos de nuestra base de datos funcionan con generadores de números aleatorios (RNG), que garantizan la completa aleatoriedad de los resultados.
Sí. Ambas modalidades funcionan con las mismas reglas, con las mismas probabilidades matemáticas y con un generador de números aleatorio; la única diferencia, claro está, es que con la versión de pago corres el riesgo de perder dinero real.
Tanto si juegas por dinero como por diversión, siempre es recomendable adquirir buenos hábitos de juego. Aunque no hay estrategias válidas para jugar al baccarat, hay que tener ciertos principios en cuenta (además de jugar de forma responsable, claro está).
No apostar nunca por el empate. Aunque se paga a 8:1, el margen de la casa es significativamente más alto (especialmente en juegos de seis barajas), por lo que estarás asumiendo un riesgo alto con muy poco valor.
Apuesta por la banca. Apostar por la banca es la opción menos lucrativa porque es la que tiene más opciones de ganar en función de la tercera carta del jugador. Además de ofrecer más probabilidades de victoria, tiene también la mejor RTP, por lo que, estadísticamente, es la mejor opción.
Evita las apuestas adicionales. Algunas variantes de baccarat ofrecen apuestas adicionales con pagos muy tentadores, pero las probabilidades de que salgan suelen ser inferiores al pago ofrecido.