Hola,
Estoy presentando una queja formal con respecto a la falla de Stake.com en hacer cumplir las políticas de juego responsable, a pesar de mis repetidos intentos de autoexcluirme y mis importantes pérdidas de juego.
Está claro que Stake.com no actuó adecuadamente en respuesta a mi comportamiento de juego y esto debe abordarse.
Historia de fondo: Mi experiencia con Stake.com
Utilicé Stake.com por primera vez en febrero de 2020, después de que un afiliado me lo recomendara. Al principio, no preví el daño que el juego causaría en mi vida, pero pronto me convertí en un gran perdedor de dinero, con pérdidas que ascendieron a millones. Stake.com lo sabía y me ofreció una oferta VIP, que incluía un reembolso del 25 % por las pérdidas. Este reembolso me permitió seguir jugando, pero las pérdidas continuaron.
Después de perder más de 3 BTC, 460 000 XRP, 614 ETH y 114 LTC, decidí autoexcluirme permanentemente de mi cuenta principal. Sin embargo, en lugar de ofrecer una intervención, abrí una nueva cuenta. Como era nueva, me comuniqué con mi administrador VIP, Eddie, quien transfirió mis beneficios VIP a la nueva cuenta. A pesar de mencionar mi autoexclusión en nuestro chat de Telegram, todo siguió como siempre y el juego continuó.
Este ciclo se repitió a lo largo de los años: me autoexcluí, abrí una nueva cuenta y Eddie transfirió mis beneficios sin cuestionamientos. Más tarde, en 2024, cuando me asignaron un nuevo administrador VIP, mis beneficios VIP se transfirieron nuevamente. A pesar de las claras señales de adicción de que perdí seis cifras altas en menos de una hora, nadie de Stake cuestionó mi regreso ni ofreció ayuda.
Múltiples autoexclusiones sin seguimiento
Envié un correo electrónico a Stake para solicitar una autoexclusión temporal debido a que perdí grandes cantidades de dinero. Solicité la autoexclusión más de cinco veces en la misma cuenta y, en cada ocasión, me la aceptaron. Sin embargo, una vez que la exclusión expiró, nadie se comunicó conmigo para comprobar cómo estaba. Inmediatamente volví a jugar y perdí seis cifras.
La frecuencia de mis autoexclusiones, combinada con mis patrones de apuestas (sesiones de menos de 10 minutos), historial de depósitos y registros de chat con Eddie, deberían haber sido una señal de alerta. A pesar de esto, nadie me hizo seguimiento ni ofreció intervención. En lugar de priorizar mi bienestar, Stake me permitió seguir jugando, creando nuevas cuentas y perdiendo más dinero.
Recargas y ofertas de seguimiento
Cada vez que mis recargas expiraban, el administrador VIP me enviaba mensajes de seguimiento ofreciéndome nuevas recargas, lo que a menudo sucedía después de que me había alejado de los juegos de azar y no había usado Stake durante un buen tiempo y no había solicitado ningún bono. Estas ofertas hicieron que fuera difícil resistirme y, a menudo, volvía a jugar, solo para caer en el mismo ciclo. Este comportamiento depredador demostró que Stake no estaba priorizando mi bienestar y claramente buscaba volver a involucrarme en los juegos de azar en Stake.
Sería difícil para Eddie no darse cuenta de la situación;
Si bien no puedo decir con certeza que Eddie sabía de mi adicción, habría sido imposible para él no notar el comportamiento repetido. Siempre pedí reembolsos, hablé abiertamente de mis pérdidas y dejé en claro que me autoexcluía y me autoexcluía en ocasiones cuando recibía ofertas de recarga mientras una exclusión estaba activa, solo para volver y pedir el mismo trato en una nueva cuenta.
En nuestras comunicaciones, mencioné mis pérdidas significativas, los intentos de autoexclusión y las nuevas cuentas. Eddie, como propietario de Stake.com, debería haber notado claramente estas señales de alerta y haber tomado medidas.
Stake.com debe asumir la responsabilidad por no aplicar políticas de juego responsable. Me autoexcluí en repetidas ocasiones debido a mis pérdidas en el juego, y la frecuencia de estas exclusiones debería haber sido una señal evidente de un problema. A pesar de que Eddie estaba al tanto de mi comportamiento, no se ofreció ninguna intervención y Stake me permitió seguir jugando.
Si bien entiendo que recuperar el monto total puede no ser factible, creo que la compensación por los fondos que perdí debido a la negligencia de Stake es justa. Stake no intervino cuando había signos claros de adicción y mis reiteradas autoexclusiones fueron en gran medida ignoradas. En lugar de protegerme, Stake me permitió seguir jugando, lo que contribuyó a causarme más daño.
Insto a Stake.com a que revise sus políticas de juego responsable, especialmente cómo manejan las autoexclusiones reiteradas y la transferencia de beneficios VIP. Los jugadores que muestren signos de adicción, como las autoexclusiones frecuentes, deberían ser identificados y apoyados activamente a través de una intervención, no se los debería dejar que se las arreglen solos. Los límites de juego deberían ser parte de un esfuerzo más amplio para proteger a los jugadores, no solo una herramienta para la autogestión.
Hello,
I am filing a formal complaint regarding Stake.com's failure to enforce responsible gambling policies, despite my repeated attempts to self-exclude and my significant gambling losses.
It is clear that Stake.com failed to act appropriately in response to my gambling behavior, and this needs to be addressed.
Backstory: My Experience with Stake.com
I first used Stake.com in February 2020 after being encouraged by an affiliate. Initially, I didn’t foresee the toll gambling would take on my life, but I soon became a big money loser, with losses amounting to millions. Stake.com knew of this and offered me a VIP deal, which included 25% cashback on losses. This cashback kept me playing, but the losses continued.
After losing over 3 BTC, 460,000 XRP, 614 ETH, and 114 LTC, I decided to permanently self-exclude from my main account. However, instead of offering intervention, I opened a new account. Since it was new, I reached out to my VIP manager, Eddie, who transferred my VIP benefits to the new account. Despite mentioning my self-exclusion in our Telegram chat, it was business as usual, and the gambling continued.
This cycle repeated over the years: I self-excluded, opened a new account, and Eddie would transfer my benefits without question. Later in 2024, when I was assigned a new VIP manager, my VIP benefits were transferred again. Despite clear signs of addiction of me losing high 6 figures in less than an hour, no one from Stake questioned my return or offered help.
Multiple Self-Exclusions Without Follow-Up
I emailed Stake to request temporary self-exclusions due to losing large amounts of money. I requested self-exclusions over five times on the same account, and each time, they were honored. However, once the exclusion expired, no one reached out to check on my well-being. I immediately went back to gambling, losing six figures.
The frequency of my self-exclusions, combined with my betting patterns (sessions under 10 minutes), deposit history, and chat logs with Eddie, should have been a red flag. Despite this, no one followed up or offered intervention. Instead of prioritizing my well-being, Stake allowed me to continue gambling, creating new accounts, and losing more money.
Reloads and Follow-Up Offers
Whenever my reloads expired, VIP manager sent me follow-up messages offering new reloads, which often happened after I had stayed away from gambling and not used Stake in a good while and not requested any bonuses myself. These offers made it hard to resist, and I often returned to gambling, only to fall into the same cycle. This predatory behavior showed that Stake wasn’t prioritizing my well-being and clearly looking to re-engage me into gambling on Stake.
It Would Be Hard for Eddie Not to Notice the Situation;
While I can’t say with certainty that Eddie knew of my addiction, it would have been impossible for him not to notice the repeated behavior. I consistently reached out for cashback, openly discussed my losses, and made it clear that I was self-excluding and self-excluded at times when I received Reload offers while a exclusion was active, only to return and ask for the same treatment on a new account.
In our communications, I mentioned my significant losses, self-exclusion attempts, and new accounts. Eddie, as the owner of Stake.com, should have clearly noticed these red flags and taken action.
Stake.com must take responsibility for failing to enforce responsible gambling policies. I repeatedly self-excluded due to my gambling losses, and the frequency of these exclusions should have been an obvious sign of a problem. Despite Eddie’s awareness of my behavior, no intervention was offered, and Stake allowed me to continue gambling.
While I understand that recovering the full amount may not be feasible, I believe compensation for the funds I lost due to Stake’s negligence is fair. Stake failed to intervene when clear signs of addiction were present, and my repeated self-exclusions were largely ignored. Instead of protecting me, Stake enabled me to continue playing, contributing to further harm.
I urge Stake.com to review their responsible gambling policies, especially how they handle repeated self-exclusions and the transfer of VIP benefits. Players showing signs of addiction, like frequent self-exclusions, should be flagged and actively supported through intervention, not left to manage on their own. Gambling limits should be part of a broader effort to protect players, not just a tool for self-management.
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