El jugador japonés era sospechoso de blanqueo de dinero por parte del casino. Después de presentar y recibir la aprobación de los documentos solicitados, proporcionó su dirección TRC20, sin embargo, su dinero no fue depositado. A pesar de numerosos intentos de ponerse en contacto con el casino, el jugador no recibió respuesta. Intentamos intervenir e invitar al casino a unirse a la conversación, pero no hubo cooperación por su parte. La queja se marcó como "no resuelta", lo que podría haber afectado negativamente la calificación del casino. Le habíamos aconsejado al jugador que se pusiera en contacto con la Autoridad de eGaming de Curazao para presentar una queja.