La jugadora chilena había depositado 110 euros en Kingdom Casino y había ganado, solicitando un retiro de 250 euros. Después de esperar dos días sin recibir los fondos, la jugadora no pudo iniciar sesión en su cuenta y no había recibido respuesta a sus correos electrónicos, a pesar de haber realizado retiros exitosos anteriores en otros casinos. La queja fue enviada al casino, que indicó que la cuenta había sido cerrada debido a una actividad fraudulenta, pero no proporcionó detalles. Se le recomendó al jugador que se comunicara con eCOGRA para obtener más ayuda. Finalmente, la queja fue rechazada porque el ADR consideró que las acciones del casino estaban justificadas y el jugador fue informado de esta decisión.