El jugador del Reino Unido afirmó que GoRILLA WINS lo había estafado al no pagarle su retiro verificado de £4,928. También informó problemas con el juego de ruleta, donde sus apuestas se cambiaron automáticamente, lo que provocó pagos mínimos a pesar de sus apuestas iniciales. El jugador describió un servicio de atención al cliente poco receptivo y grosero. El Equipo de Quejas había intentado comunicarse con el casino varias veces, pero no recibió respuesta. En consecuencia, la queja se cerró como "sin resolver", lo que podría haber afectado negativamente a la calificación del casino. Se le informó al jugador que la falta de una licencia válida del casino limitaba las opciones de resolución.