Al jugador mexicano le confiscaron ganancias de más de diez mil pesos. El casino afirmó que los fondos se ganaron mediante bonos y que registró varias cuentas, acusaciones que él negó. El jugador tenía pruebas que respaldaban sus afirmaciones. Explicó que él y sus compañeros, que también se registraron y jugaron en el casino, utilizaban la misma red Wi-Fi en su lugar de trabajo. El jugador insistió en que todos utilizaron sus dispositivos y métodos de pago individuales. A pesar de la voluntad del jugador de proporcionar identificación a todos los involucrados, el casino no resolvió el problema. Debido a la falta de respuesta del jugador a las consultas adicionales del Equipo de Quejas, tuvimos que rechazar la queja. Sin embargo, el jugador podría reabrir el caso en el futuro si decide retomar la comunicación.