El jugador holandés llevaba más de un mes sin poder retirar fondos del casino. A pesar de recibir un correo electrónico indicando que se realizaría el pago y de contactar repetidamente al soporte en vivo y enviar correos electrónicos, el jugador no recibió respuesta ni el pago. El casino había informado al jugador, que era un jugador autoexcluido, que el retraso se debía a problemas técnicos. El problema se resolvió cuando el casino finalmente procesó el pago.