La jugadora de Alberta informó de un error en un juego y responsabilizó al casino por las pérdidas. El casino no había abordado el problema ni le había devuelto el dinero a la jugadora. Intentamos reunir más información y ampliamos el tiempo de respuesta, pero la jugadora no respondió. En consecuencia, la queja fue rechazada debido a la falta de comunicación por parte de la jugadora.