El jugador de Noruega había retirado las ganancias de un bono de primer depósito, pero solo recibió la mitad del monto. Después de esperar más de seis semanas por el resto, el casino solicitó una prueba de domicilio, que fue aprobada, pero luego se cerró la cuenta y se confiscaron los fondos restantes. El Equipo de Quejas investigó la situación y concluyó que el jugador había actuado en connivencia con otros o había usado varias cuentas para explotar la oferta de bienvenida del casino, lo que llevó al rechazo de la queja.