El jugador italiano obtuvo 4.740 euros en ganancias jugando al speed baccarat en un casino en vivo. Sin embargo, no pudo retirar esta cantidad debido a que su cuenta fue suspendida. A pesar de que su cuenta había sido verificada y desbloqueada previamente, y de que había expresado su voluntad de proporcionar todos los documentos necesarios, el casino no le había permitido retirar sus ganancias. El casino respondió después de un mes, afirmando que el retiro sería posible después de 180 días, sin solicitar documentos adicionales. Más tarde, el casino declaró que la cuenta del jugador requería una mayor investigación, pero no proporcionó razones específicas para ello. A pesar de los repetidos intentos del Equipo de Quejas de resolver el problema, el casino no cooperó. Como resultado, la queja fue marcada como "no resuelta", lo que podría haber afectado negativamente la calificación del casino. Se recomendó al jugador que se pusiera en contacto con la Agenzia delle Dogane e dei Monopoli para obtener más ayuda.